Movimiento escénico-coreográfico
Y llegó Rosamari y llegó el movimiento. El actor/ actriz es cuerpo y voz. Creo en la fisicidad del actor y la actriz. Necesito trabajar con profesionales que conozcan su cuerpo, que sepan lo que expresan sus movimientos. No quiero voces que se desplazan de cualquier manera por el espacio.
Movimiento Escénico para construir líneas fluidas sobre el escenario, cuadros estéticos, posicionar los elementos escenográficos, personajes y objetos siempre de forma consciente para generar las distintas emociones.
Movimientos coreográficos que acompañarán al movimiento escénico, definiendo partes concretas y acercándonos a la limpieza de la danza en la composición. No pretendemos ser bailarinas, pero podemos coreografiar nuestros movimientos.
Voz y cuerpo. Si estos dos instrumentos están bien afinados estaremos más cerca de conseguir la comunicación y la transmisión de la emoción.
Este espectáculo se cimienta sobre el texto, pero es imposible construir el edificio, la obra completa, si no cuidamos la presencia física, el movimiento escénico y la coreografía de distintos tiempos de la obra, donde la imagen equilibra la ausencia de este.
LaSaL Teatro ha trabajado de esta manera desde sus comienzos, dándole una gran importancia a la fisicidad de los actores y actrices participantes en la creación. Es una seña de identidad.
Y para construir todo esto, es fundamental el trabajo que Rosamari desarrollará, durante dos días a la semana, en la época de ensayos hasta el momento del estreno.